Conociendo colecciones 1/1

Colecciones de verdad 1:1

Una  vez leí en algún foro de facebook, un texto que se relacionaba con la definición de lo que es ser coleccionista de autos a escala. La idea principal,  exponía la premisa que indica que como no es posible, coleccionar automóviles de verdad, al menos en mi caso eso es imposible por el alto costo que significaría y por no tener un lugar donde dejarlos, era mejor obtener modelos a  escala para poder apreciarlos mejor.

Como estoy haciendo algunos respaldos de la información que tengo en mi laptop, descubrí que tenía material  digital que no había utilizado en ninguna parte, asi que recordé que podia compartirlo en este blog  y así darlo a conocer masivamente.

Hay tres escenarios posibles, en los cuales es posible identificar cuál es el futuro inmediato de los automóviles reales:

1.- Que se conviertan en clásicos y estén en un museo, o en una colección privada.

2.- Que sean clásicos, pero estén alamacenados a la espera de una restauración

3.- Que sean desechados.

Caso 1: 

En el año 2010 escuché o me enteré por algún medio, que la empresa JEDIMAR ( Jesus Diez Martinez), mas conocida en Chile como TURBUS, había abierto un muse de automóviles clásicos, incluso creo haber visto en televisión algún reportaje sobre este evento. Pensé que sería una exposición temporal y que no podría verla nunca. Y claro, en un comienzo, esta exposición estuvo en la Estación Mapocho, una estación de trenes hoy convertida en un centro cultural multieventos, y posteriormente se instaló permanentemente en un remodelado galpón que antaño fue una empresa grande relacionada con la molienda de granos.

Pese que viajé varias veces a Santiago, nunca pude ir a este lugar. Sin embargo, el  año pasado, en Agosto, estuve un mes completo trabajando en la capital. Aproveché los fines de semana para caminar y recorrer los lugares por los cuales alguna vez anduve. Así fué como llegué al museo JEDIMAR, llegué a eso de las 10 AM, pagué mi entrada ( con descuento) y estuve aproximadamente cuatro horas en su interior. Como era sábado, y era temprano, tuve la suerte que no había público en ese momento y durante todo el tiempo que estuve en el interior, vi que había personas que entraban, daban un vistazo y se iban. Eso... no es disfrutar de los autos. 

Bueno, ahí me dí cuenta que este tema, me apasiona. Sino, hubiera estado cinco minutos y me hubiese largado. Pero no, no fué así.

Me entretuve sacando fotografías y grabando algunos videos, hasta que se me acabó la memoria de la cámara, lamento no haber llevado otra memory stick para haber seguido registrando cosas.

Sin embargo, creo que las cuatro horas de recorrido fueron super gratificantes. Incluso, un funcionario del museo, me autorizó a acercarme a uno de los autos en exposición ( un Ford GT.40) y pude tocarlo, abrir una de sus  puertas y hacer un walk around ( pese a que sonaban las alarmas de protección).

Esta colección, se caracteriza por poseer automóviles en perfectas condiciones de funcionamiento, muchos de ellos han sido comprados "as is", es decir, no han tenido que modificar absolutamente nada.

Esta presentación fué realizada sobre la base de fotografías que tomé ese día

Este video, lo hice sobre la base de grabaciones que realicé. Vean, por favor, la información que un funcionario del museo me entregó sobre los automóviles de la colección

Caso 2

Recorriendo los lugares de Copiapó, encontré una empresa en la cual hay albergados varios automóviles clásicos. Hay vehículos que datan desde 1920 hasta otros de 1980. En la grabación que verán  a continuación podrán ver que ninguno de ellos ha sido reacondicionado. El dueño de todos estos autos, tiene en mente comenzar - algún día - con los trabajos de recuperación de estos autos. Pero, compromisos de sus empresas y la falta de tiempo, han dejado este plan de lado. 

Video realizado sobre la base de fotografías obtenidas el año 2010.

Caso 3

Ya cuando los automviles no tienen vuelta atrás, suelen ser abandonados y vendidos como chatarra. En diversos lugares del mundo existen Yunk Yards, en los cuales se acumulan toneladas de desperdicios de automoviles. En el 2011, anduve en bicicleta por algunos lugares de Copiapó y vi esto...

Bueno, así es la vida de los automoviles. Si tuviese el potencial financiero necesario, me haría restaurador de automoviles, en serio!.